Solo un montón de cenizas que arden como nunca antes (...)

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Y de repente, mi mundo vuelve a caerse. Así sin más...los pedazos que tanto me costó volver a poner en su lugar, se derrumban nuevamente sin piedad frente a mis ojos. Esa estúpida ilusión de que la herida jamás volvería a abrirse, se desmoronó tan rápido como tus manos escribieron el mensaje. 

Por qué, me sigo preguntando. Por qué chucha si ha pasado tanto tiempo. 

Mochileo

Voy a juntar todo el dinero que necesite, comparé las cosas, y me iré a mochilear. Bienvenida toda compañía. 

He dicho.

Paciencia Yaz, paciencia. 

-.saltodefe / sinsentido.-

      Si hay algo que rescato de este año (culiao), fue haber aprendido que la fe es una opción libre y personal, es una respuesta al llamado que Él me ha estado haciendo desde siempre. Llamado que descubro a raíz de una búsqueda de sentido de mi vida; búsqueda de "aquello" que me plenifique, que me haga feliz, que me complete...sin embargo, ¿qué pasa cuando creo que nada tiene sentido? Y no estoy aludiendo a pensamientos depresivos ni nada por el estilo, simplemente es un cuestionamiento personal que me ha acechado todo el (puto) año, y no es la primera vez que ronda por los obscuros y desolados pasillos de mi mente. Al final, llego a la misma conclusión: no sé dónde estoy, no sé a dónde voy. No sé cómo encontrarTe. No me siento capaz de dar ese salto al vacío al que alude Ratzinger, porque simplemente no sé cómo hacerlo. Siento que estoy de pie en la última roca de la montaña: si doy un paso más, caigo al vacío, a Tus brazos, a Tu amor. Pero sigo ahí, en la roca que no quiero estar. A pesar de abrir lo más posible los ojos, y tratar de enfocar bien, no logro ver lo que quieres enseñarme, lo que tienes para mí...para nosotros. 

      Sigo siendo aquella niña que Tus ojos han visto desde siempre, pero con más angustia, miedo y des-esperanza...y aquí estoy, ahogándome en mi propio lugar. Esperando y deseando que Tus manos sequen los ríos que corren incesantemente por estas mejillas. 

Dosmiltrece

No sé qué hueá tiene la gente con el año nuevo... o con esa estúpida ilusión de que todo queda atrás. Me declaro una víctima sanguinaria de esa ilusión culiá. Dos-mil-trece, acábate luego conchatumare'.


Año culiao. Bien culiao. Re culiao. Culiao, culiao, culiao.

He dicho.

¿Es mucho pedir?

Me dijiste, de hecho prometiste, que siempre estarías conmigo, aún más en momentos como éstos. Bueno...sigo esperando a que llegues con un abrazo, nada más. ¿Es mucho pedir?

Y tú, ¿qué tanto de esto puedes ver?

      Corres tan rápido como nunca creíste ser capaz. Pero ahí está ella, siempre detrás de ti, acechándote. No importa lo rápido que puedas correr pues cada vez que mires hacia atrás, ahí estará. Y nuevamente tropiezas, caes y te lamentas. Te lamentas por estar ahí, por tropezar siempre con lo mismo. Te lamentas porque sabes que en un par de segundos más estarás quemándote...viendo cómo esa llama te consume...otra vez. Te vuelves tan frágil como el último trozo de papel que lanzaste al papelero. Te deshaces tan rápido que ni tu ahogada voz alcanza a clamar por el último grito de ayuda. Desesperación. Ahogo. Terror. Lo que era tu cuerpo comienza a desmembrarse para terminar siendo solo un montón de cenizas, solo un montón de historias, de pensamientos, de ideas. Solo un montón de no-sé-qué que ni tú misma supiste valorar.

¿Acaso no te das cuenta?

Quince minutoS.-

      Quince minutos. Quince eternos minutos. No era el paisaje más bonito que podía estar observando en ese momento, pero no importaba. Nada me importaba. ¿Y qué te va a importar cuando lo único que quieres es desaparecer? Qué pena. Qué rabia. Qué impotencia. Qué....nada. En eso estuve: en nada. Quince eternos minutos. El tiempo es relativo. Depende, todo depende. No se dan cuenta del daño que están causando. No soy la única, y más tristeza me da. ¿Cómo no se dan cuenta? No quiero retirarme de esto, porque amo dedicar mi tiempo y mis vacaciones a servirTe... a encontrarTe cada vez de una manera distinta. Pero no quiero que me sigan haciendo daño. No, no quiero. Tal vez para unos no es importante, pero para mí sí. Las palabras son una de las peores armas, ¿sabes?, porque dejan cicatrices no visibles para otros ojos que no sean los Tuyos y los míos. Pero cicatrices al fin y al cabo. Y hoy vengo aquí, a agradecerTe. Sé que muchas veces Te pongo en duda, digo que no Te siento, y cuántas cosas más...pero hoy sé que siempre fuiste Tú quien ha estado conmigo. Sé que has sido Tú quien me ha dado la fuerza necesaria para mantenerme en pie, para luchar por ellos, por mí...por Ti. Y fuiste Tú, quien me acompañó en esos quince minutos. Quince eternos minutos...

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Crisis mode on.

...se baja el telón, hasta nuevo aviso. 

Meló-colía

Melódica melancolía que embriagas el aire que viaja hacia mis pulmones, y te embarcas en un nuevo proyecto para recorrer este despechado cuerpo. Melódica melancolía es la que hoy suena en esta noche sin reflejo donde no existe el tiempo. ¡Oh, es cierto! Esa melódica melancolía... esa música que marchita una y otra vez este corazón abierto, seco... muerto.

Sin prisa, pero sin pausA.-

Unadelasmásluminosas

"Los buenos amigos son como las estrellas..

Y es que así es de imprevista la vida, y por eso me encanta (aunque a veces lo deteste). Personas van y vienen, entran, salen, se quedan, vuelven a entrar, se vuelven a quedar. Una vez leí por ahí algo que decía más o menos así: "la vida decide quién entra a tu vida, pero tú decides quién se queda". Y bueno, decidí que te quedaras, eso quería. Y así Te envió a mi vida, Él sabía.. lo sabía. ¿Una estrella más? No, ésta es especial. Gracias por hoy ser una de las estrellas más luminosas que tengo. 

...no siempre los ves, pero siempre están ahí".